De esos que se olvidan..

Pozo altanero de ideas venidas a menos.

Instinto fallido de supervivencia estúpida.

Esporas de remordimiento que carcomen la piel.

No eres aquello que pensabas

¿Qué te queda? Mil reclamos de una cólera sin sentido, abrigada por las ilusiones que alimentan la vida.

¿Qué te queda? Aquel hueco de fantasías que ahora es rellenado por una realidad fulminante.

Prueba inequívoca de que has dejado de soñar. Abandonando el lecho reconfortante del sueño.

Llevando en la espalda una realidad que busca ser compañía más que carga....

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La zozobra de querer intentar abruma el aire

minucioso amigo que en lo volátil de su alma recubre una añoranza.

Ambigüedad que testifica vida

Ejemplificar lo que se recubre...

-¿Qué más puedo decir que mi memoria no haya olvidado ya?- leí en un libro, olvidado todo, comencemos entonces el festín.-

No lo quise ,,, lo siento viri

Llegas, haces un revuelco, elevas todo y me despeino, no confió en mí, no puedo ni pensarlo.

Lloro no sé si por lo culpable que me hace la conciencia, o por lo que tú generas. Soy una bomba, eso lo pienso a menudo,¿ por qué?, otro que no se responde aún.

El botón que lo borra todo se descompuso, por qué si yo lo quiero.

Me siento una niña, y el berrinche es el modo, no lo quiero, no me escuchas y te quedas.

    Quiero soledad porque no he aprendido a vivir con compañía. Digo negro y ellos escuchan verde.

Es mi falla orgánica, la autenticidad se quedo en la parada del autobús.

Trabajo para los aplausos, no, lo confesé. Mis lágrimas rodean las mejillas, no es cierto apenas se asoman, pero ya no quiero invitarte. Las tunas del nopal que plantamos ya no son divertidas, sus espinas ya no se olvidan. Te dejo de ver hasta que no me importe verte, hasta que sea uno aún cuando no estes--.. 

    Caigo a la cuenta de que no puedo caminar así....

Entre las letras de los episodios que se almacenan no hay nada para enorgullecerse, el artista deprimido ha creído que despierta, que ya no sueña, que por fin se libera. Trampa astuta del que escribe, otra vez, se ha dormido,-No lo hagas cariño, intenta caminar sin muletas, intenta ser libre aunque duela-- No es una moda la que te aconsejo, es una incierta verdad que debes probar.

Intentaré salvar, el rico que quiere apostar se ha callado ya, otra arranque más, insistiré hasta que me convenza de que es realidad o bien, lo pueda cambiar... 

    Un día podré decirle al cartero lo que la carta escrito tenía, por ahora ni la descripción de sucesos me permito, no por importancia, solamente porque la vergüenza que el juicio trajo no me deja  contarlo....

No supe como decir que quería decir algo..

El sentimiento es esa cosa deliciosa porque te hace crear, sí, crear aunque sea tonterías indefinidas.

Te hace sentir fuerte, para recordarte que regularmente eres débil. 

Te revuelca en una tempestad de gloria, para después catapultarte a lo simple y vanal de lo diario.

El sentimiento te hace reír, evoca de ti todo aquello que duerme porque es lo menos peligroso para vivir.

Hace escribir divagues sin sentido que en el sueño se rebelan.

Dice de ti lo afortunado que eres de recibirlo, de crearlo, aprisionarlo, solamente para que en otra época lo añores. A veces es tan fuerte que te hace inspirar un cambio, cambio que legitima la destrucción que después vendrá.

El sentimiento alberga el cúmulo de felicidad o desdicha necesaria para saberse humano; es ese momento donde cobra sentido, el sinsentido de intentar significar algo que no esta para ser significado, sino para ser vivido. 

Dice el diccionario que el sentimiento es una disposición emocional a una cosa, yo me quedo con todo lo que dije antes....

Si soy yo...

Me canso de todo.....

De los que que quieren cambiar al mundo, de los que no..

De los que son apáticos, de los utópicos..

Me canso de mí, de la realidad y del sueño..

Me canso del que señala, me canso de todo esto que no es...

Intentar vivir, sólo eso y ya...

No cambiar, no inventar, vivir y ya..

¿Cómo criticar el alimento que te mantiene vivo?

Ejercicio del desesperante,  todo esto ante mis ojos...

En medio no hay nada más que yo..

Me canso de esto, de la realidad que sólo sirve para ser criticada..

Me canso del hartazgo y de la comodidad..

Me canso de ti que intentando cambiar al mundo te revuelcas en la suciedad imperante...

No lo intentó, soy el débil de la película.. Soy el que busca en silencio por pena a discutirlo...

Soy ese que como tantos más se cansa de todo, rogando al jefe que no termine, no al menos solo.....

Don Nico.

Don Nico tiró la flor, su mano ya no tenía fuerza para sostenerla. Con mirada vaga observaba la lluvia, un cielo negro orquestaba un festín de truenos, la silla mecedora se iluminaba con los destellos de todos sus recuerdos. 

La habitación amplia cumplía su función: aprisionaba todo su ser, en la cama descansaban todos sus adioses, el ropero estaba lleno de melancolía, no cabía nada más... El espejo refleja sus andanzas, la silla cedió a la presión de fracasos sin sentido.

Nicolás Camacho envejeció una tarde de lluvia, cuando la flor de su mano no llegó a su destino, se quedó atorada en la ventana... nada más podía salir, nada más podía entrar, todo estaba dispuesto para el festín de don Nico y la muerte.....

Un día.

Yo quería escribir, cansar la mano y desahogar la mente.

No lo pude hacer, no tenía palabras, me quedé atorado en el umbral de la sopa de letras. Lo intenté una vez más, en calzones por culpa del calor, borré y volví a escribir en la computadora.

No sé de reglas, aprendo día con día.. No pude escribir, era poco lo que tenía. Desanimado bebí alcohol y mas que desahogar la mente, ahogué mi hígado.Ya no pude escribir, la botella no se alejo de mí, no se lo permití..

Así, termine ahogado en alcohol, con la mano cansada de sostener a mi compañera la botella y con mi mente repleta.... ella sí, no se pudo desahogar....